Las baterías inteligentes, la mejor alternativa para optimizar los excedentes de autoconsumo

 

El Periódico de la Energía afirma en un artículo titulado “La CNMC deja al Gobierno sin aprobar la normativa para compensar los excedentes de autoconsumo antes de las elecciones” que la compensación simplificada de los excedentes (compensación económica por vatio vertido a la red a descontar de la factura eléctrica) contemplada en el RD 244/2019 de Autoconsumo no verá la luz antes de las elecciones. A fecha de hoy, 6 de noviembre, la CNMC no ha aprobado aún el protocolo de actuación necesario para estandarizar los procedimientos que se deben llevar a cabo entre distribuidoras, comunidades autónomas, comercializadoras y autoconsumidores por igual en todo el territorio español y, hasta que esto no ocurra, el Ministerio de Transición Ecológica no podrá aprobar la normativa. 

Esto nos conduce a hablar, una vez más, del importante papel que juegan las baterías y de las ventajas que tiene contar con un sistema de almacenamiento frente a la compensación. Para obtener rentabilidad de su excedente de autoconsumo, el usuario no tiene que esperar a la aprobación de esta normativa para verter la energía sobrante a la red, sino que puede sacarle partido desde el principio con el uso de una Smart battery.  

¿Qué nos lleva a esta afirmación? Una batería inteligente, aquella que cuenta con un software de control, almacena la energía procedente de la instalación solar fotovoltaica y de la red eléctrica en función de las necesidades y hábitos de consumo del usuario. Gracias al gestor inteligente de energía EMS (Energy Management System) monitoriza en todo momento, a través de un software inteligente, los hábitos de consumo del usuario. Además, predice la generación de energía fotovoltaica y realiza un seguimiento de la tarifa eléctrica para optimizar su funcionamiento. Los equipos son capaces de aprender y anticiparse a los patrones de consumo del cliente, predecir el recurso solar disponible mediante la previsión meteorológica y realizar un seguimiento de los precios en el mercado eléctrico, identificando los momentos en los que el coste es menor. De este modo, las baterías permiten ahorros de hasta un 70% en la factura eléctrica, a la vez que fomentan el uso de energías limpias y contribuyen a la reducción de la huella de carbono. 

Y cuando la norma entre en vigor, la batería seguirá siendo de gran utilidad ya que es una garantía para asegurar el caso económico ante volatilidades de precios del mercado, muy previsibles ante una mayor penetración de fuentes de energía renovable, y nos permite elegir el momento exacto del día en que queremos inyectar ese excedente, en función de las tarifas eléctricas, hecho que mejorará el caso económico debido al diferente precio del kWh que se espera entre horas solares y no solares. 

Gracias a su software dotado de componentes de Inteligencia Artificial y herramientas de Big Data, las baterías permitirán mejorar el rendimiento de las instalaciones bajo la modalidad de autoconsumo con excedentes. Sea como sea, con o sin compensación de excedentes, las baterías son siempre la mejor plataforma para la gestión y control inteligente de la energía.